Thursday 28 de June de 2012, 18:17:04

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El gran Raimundo Amador dice en el estribillo de su tema “Pata Palo”: “Por la baranda, chin chin chin pun...” Es verdad, antiguamente en los barcos se tiraba a la gente por la borda, por encima de la baranda, y más aún en los barcos pirata, supongo. Era la “justicia” del mar, tal vez imprescindible en un entorno hostil, inmediata y dura, inapelable,.... Y más si el juez que la impartía era “un pirata malo, que come pulpos crudos y bebe agua de mar”...

http://www.youtube.com/watch?v=phdcwY5Tg_E

Bien, supongo que a veces es imprescindible echar por la baranda ciertas cosas para que la singladura pueda proseguir, para que las cosas no se detengan y se pudran... Liberar lastre, romper amarras para que el temporal no destroce el barco contra el muelle o las rocas, recoger las velas para que la galerna no parta los palos... O deshacerse de personas inadecuadas o rutinas perversas, obstáculos insalvables para terminar con bien la travesía...

No sé por qué estos días, cada vez que abro el facebook, me fijo insistentemente en la invitación del programa a que explique qué me pasa por la cabeza (“què et passa pel cap?”, en la versión catalana). No sé, pero cuando me detengo en qué me pasa por la cabeza, independientemente de lo que sea, me da la sensación de que en buena medida coincide con lo que tendría que irse por la baranda chin chin chin pun, al menos si yo fuera un capitán pirata de verdad....

Imagino que somos un barco, que cada uno de nosotros es un barco; que nuestro ser profundo está en la estructura del casco que nos sostiene, que nuestras emociones y sentimientos se generan en la bodega, en la sentina, en los pañoles, en las tripas de la nave...; y que nuestra cabeza está arriba, en cubierta, el lugar desde el que avistamos y comprendemos el mundo y donde interaccionamos con él, con sus circunstancias y sus criaturas, esos seres que se cruzan en nuestra navegación. Ninguna de las partes tiene sentido sin el todo, desde luego, porque sin el apoyo de nuestro ser ni el manejo adecuado de nuestras emociones no podremos interaccionar en cubierta con nada ni con nadie, ni podremos comprender nada. Pero a veces la cubierta está llena de objetos y de gente que se bambolean de un lado a otro, especialmente con mares duros, presencias que ni sabes qué rayos hacen allí salvo molestar... En esos casos tal vez convenga arrojarlos por la baranda chin chin chin pun. En un barco que se precie, la cubierta ha de estar expedita y libre de cosas inútiles para estar plenamente operativa.

Pero tampoco estoy seguro de tener que arrojar por la baranda chin chin chin pun todo lo que pulula por cubierta... En cualquier caso, he sucumbido a la malévola invitación del facebook y he explicado algunas cosas que me pasan por cubierta, aunque no me parece que sean exactamente para desprenderse de ellas, o al menos no todas, según cómo se mire... Son tal vez cosas sobre las que trabajar... ¿O son precisamente obsesiones que traban mi singladura y deben lanzarse por la borda chin chin chin pun? Por de pronto, me ha dado por poner lo que os transcribo a continuación, y encima en versión pública, de forma casi impúdica, diría... Si es que cuando pienso que debería borrarme del facebook va a ser en serio, que me induce a cada cosa... ¿Exhibicionismo? Aunque qué mas da, bien pensado, no revelo nada inconfesable y nada que a nadie pueda provocarle escándalo y consternación.... Y si lo hace, pues por la baranda con él también, chin chin chin pun...

Os transcribo lo del face:

 “Jajaja..... ésta mierda de máquina me pregunta cada vez que la enciendo que qué me pasa por la cabeza; es una cotilla redomada.... No sé si tengo por qué explicarlo...... Aunque si lo acabo haciendo será porque quiero hacerlo, supongo, aunque sea una explicación sucinta y nada más.... Me pasan muchas cosas por la cabeza, cosas que a veces sé controlar maravillosamente y otras veces no tanto..... Me pasa por la cabeza cómo intentar ser feliz, cómo encauzar mi vida o al menos corregir aquellos aspectos que la hacen menos fluida y menos libre.... Cómo simplificarla, cómo hacerla sencilla.... Cómo ser agua.... Me pasa por la cabeza cómo conseguir salir a patear alta montaña de manera lo más inmediata posible, con quién y a dónde, y cómo compaginarlo con otras facetas importantes de mi vida que no tienen absolutamente nada que ver con ésta.... Me pasa por la cabeza cómo conseguir hacer algún cuatromil en los Alpes este verano.... Me pasa por la cabeza cómo sobrevivir al verano, tan inhóspito.... Me pasa por la cabeza también cómo mantener este tinglado a nivel financiero, y encima con sobrantes para poder intentar un día un viaje a Alaska o una ascensión a un seismil.... Me pasa por la cabeza cómo mejorar mi relación con personas a las que quiero, cómo distanciarme de las que no quiero, y cómo relacionarme con las que quiero pero no debería querer y viceversa.... Y por supuesto, como ya dije hace pocos días, también me pasas tú....”

Bueno, pues no sé... ¿estoy hablando de deseos o de obsesiones?... Me pasan todas estas cosas por la cabeza, pero también me pasan otras que no he revelado en el face, o que precisan lo que sí he revelado. No sé.... Cómo materializar esa forma de alegría de la que se hablaba hace pocos días en una “contra” de La Vanguardia, esa adhesión total a la existencia... O cómo conseguir prestaciones montañeras futuras sin entrenar y sin dejar de beber y fumar más o menos lo que me apetece, o cómo conseguir vencer la pereza paradójica que cada vez experimento más para salir a la montaña... O cómo conseguir que las cosas que me pasan por la cabeza no giren tanto en torno a la montaña, si total me dedico a ella esporádicamente y de forma amateur... Es decir, cómo conseguir que otras cosas a las que debo prestar atención me estimulen de la misma manera, cómo encajar todas las piezas luminosas y diversas de mi calidoscopio para que formen figuras armónicas, tal vez cambiantes pero armónicas... O cómo conseguir más dinero para solucionar mis problemas financieros sin que el trabajo se me atragante, o visto desde el reverso y más importante, cómo conseguir necesitar menos... 

Ah, y ese final, qué resbaladizo... Porque más allá de a quién quiero y a quién dejo de querer, no he mencionado cómo saber a quién quiero y a quién no quiero, que tiene su cosa para alguien como yo a quien, de buenas a primeras, nadie le cae especialmente mal, aunque tampoco especialmente bien de manera necesaria, no os equivoquéis... Y menuda tela lo de aquellas personas a las que quiero y no debería querer, o a las que no quiero pero debería querer... Especialmente me fascinan las indebidamente queridas, porque su existencia revela de forma palmaria el misterio insondable y complejo de las relaciones entre dragonas y burritos... (ah, un misterio oculto en la sentina de este blog, que también es como un barco en alta mar...). ¿Y eso de que “me pasas tú”? Pues eso, es claro, me pasas tú: “tú” pueden ser multitud de personas, criaturas, situaciones, vivencias, emociones.... O no, puedes ser tú.

Bueno, como podéis ver, tengo la cubierta llena de cosas, cosas que se mueven más o menos, que ocupan espacio más o menos, que están ahí molestando más o menos, especialmente con mar movida... Tal vez tenga la cubierta sobreocupada por deseos que pretenden solventar insatisfacciones, y eso agota y genera ansiedad... O llena de desafíos, lo que no es malo mientras no te bloquée y también provoque ansiedad... Tal vez debería llenar la cubierta con cosas formuladas de diferente manera, formuladas como realidades y logros presentes, y no como ansias o deseos aún pendientes, futuros... Tal vez por cómo las enfoco se convierten en problemas que han de irse por la baranda chin chin chin pun... ¿O precisamente debería estibarlas bien en cubierta, conservarlas conmigo y prestarles toda mi atención?... A veces pienso que simplemente debo dejar la cubierta vacía, absolutamente vacía, como la de un buque que ni siquiera ha sido botado... A menudo me lo reclama algo aquí dentro, quizás algo impregnado en las cuadernas del casco, y lo voy intentando... Pero no es fácil, no.

¿Por la baranda chin chin chin pun?... Decididamente, qué mierda de capitán pirata estoy hecho, cómo se nota que el pulpo me gusta en vinagreta o a la gallega, y regado con Alvarinho, ajajajaja....

2 Comentarios

Enviado por Quo_aquo el Tuesday 3 de July de 2012

�a mi el mar me da un poco de miedo... pero lo echar cosas por la borda y cantar chin chnm chin pun..... Me encanta! jajajaja.QUO... Leyendo "ligero de Equipaje" (de Tony de Mello)�

Enviado por Pep el Monday 16 de July de 2012

�Es lo que tiene pasarse del Jack Daniel's al Ron Jamaicano...�