Visiones que a veces le asaltan a uno cuando va por el monte en determinadas compañías.... Ésta, de hace ya tanto como junio del 2008...
En la senda intrincada de mi vida madura
el tiempo se retuerce driblando una carencia,
vuelto sobre sí mismo la convierte en querencia
que entre dudas y excusas se nutre y se tortura.
Somos un desencuentro en la corriente oscura
que entreteje arbitraria nuestras vidas ya hechas.
Te he conocido tarde y creo que me acechas,
sin que tú lo pretendas, luciendo tu cintura.
No sé qué espero ahora de tu risa cantante,
de tu libre albedrío que se me antoja hielo,
de tu cuerpo menudo, de tu sombra danzante.
Bailarina inasible, evanescente anhelo,
achaque de mi vida que me incita constante
a respirar las flores que anidan en tu pelo.